Aunque muchos teman al color blanco en invierno, los abrigos de este níveo tono son todo un básico de fondo de armario y sus posibilidades son casi tan amplias como las que ofrecen los abrigos de color negro, camel o azul marino. Bien es cierto que el temor viene justificado por la facilidad de los mismos para perder su tono o aspecto originales pero, con los cuidados adecuados, los abrigos blancos no solo serán la quintaesencia del lujo, sino que aportarán un toque diferente y fresco a los looks.
Este año han estado presentes en pasarelas como la de Lanvin, Stella McCartney, Chanel, Hermès o Dolce & Gabbana, en cada colección con un estilo diferente, desde los clásicos sastre abotonados hasta las gabardinas de piel más buscadas. Aterrizando todas estas tendencias sobre el asfalto, las prescriptoras de estilo internacionales han elegido las siluetas a tener en cuenta en esta materia creando la guía perfecta para lucir el abrigo blanco este año.
Toma nota de qué versiones eligen las expertas en moda, cómo combinan cada una de ellas y prepárate, y nunca mejor dicho, para dar en el blanco.
El más sencillo y elegante de todos los tipos de abrigo se viste de color blanco. Perfecto para lucir con looks total black como hace esta fashionista y añadir un toque sporty con unas deportivas blancas.
Los de esta tipología son perfectos para el entretiempo y para llevar en los looks de trabajo acompañados de unas botas slouchy y bolso negro.
Abrigo de lana con botones, de Gucci (2.500 euros).
¡Lo quiero!
Abrigo abotonado, de Guess (199,90 euros).
¡Lo quiero!
Si hace poco hablábamos del poder elevador de los abrigos con cinturón, este se incrementa cuando son de color blanco. En este caso, son perfectos para lucir con estilismos completamente blancos.
Un truco sencillo es añadir a los estilismos total white zapatos o bolso en negro, para crear un binomio perfecto.
Abrigo con cinturón, de Loewe (1.900 euros).
¡Lo quiero!
Abrigo estilo capa con cinturón, de MVP Wardrobe (259 euros).
¡Lo quiero!
El de borreguito también se impone en materia de looks total white, sin duda, uno de los más apetecibles de la temporada.
Abrigo de borreguito con cinturón, de Ganni (325 euros).
¡Lo quiero!
Abrigo corto de pelo, de The Kooples (425 euros).
¡Lo quiero!
SI lo tuyo es la mezcla de estilos, busca uno abotonado con detalles de pelo en el cuello, como el de Lanvin que Bella Hadid lucía dentro y fuera de las pasarelas.
Abrigo con detalle de pelo en el cuello, de Ralph Lauren (399 euros).
¡Lo quiero!
Hay vida más allá de las gabardinas beige o camel. El mejor ejemplo son las de color blanco. Elígelas en tejidos como el cuero o la piel vegana.
Gabardina blanca de algodón, de Bottega Veneta (1.850 euros).
¡Lo quiero!
Los abrigos de gran longitud se han convertido en un indispensable de la temporada. El de color blanco, tal y como demuestra Caroline Daur, es perfecto para lograr un estilismo bicolor de lo más elegante.
Asimismo, a pesar de su marcada estética formal, también encaja con botas de agua de cara a los estilismos diurnos.
Abrigo oversize, de Zara (109 euros).
¡Lo quiero!
El plumífero se ha erigido como una de las tendencias inesperadas en materia de abrigos. Esta apuesta cómoda ahora se lleva en clave elegante, combinando los abrigos de plumas con prendas como pantalones de traje.
Plumífero de Desigual x Ecoalf (279,95 euros).
¡Lo quiero!
Plumífero, de Bershka (29,99 euros).
¡Lo quiero!
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