Jos\u00e9 Antonio Avil\u00e9s confiesa sus problemas y se pone en tratamiento: \

El primer paso para superar un problema es reconocerlo, y José Antonio Avilés ya lo ha hecho. El sábado se enfrentó a Emma García y al resto de sus compañeros en Viva la vida, e intentó justificar su comportamiento asegurando que todo partía de su infancia. El ex superviviente confesaba que de pequeño había sufrido bullying: «Todo empezó en el cole, con seis años, desde primero hasta sexto de primaria, fueron los años más duros de mi vida. Era afeminado, gordito y eso la gente no lo entendía. Me pegaban en el cole diariamente, y en la calle también». Emocionado y entre lágrimas, justificaba su comportamiento posterior diciendo que «las mentiras comenzaron cuando creé una persona paralela, que diera miedo, que la gente no quisiera pegar porque sino se meterían en un lío», admitía.

Pero estas explicaciones no convencieron a su jefa, ni a los espectadores, ni a Jordi González, que en Supervivientes: Conexión Honduras, le tiró de las orejas.

Jordi, a Avilés: «No puedes justificar lo que tú has hecho argumentando que de pequeño sufriste acoso en la escuela» https://t.co/0FBgMJbayp #ConexiónHonduras13 pic.twitter.com/y5pISqnfQN

La bronca de Jordi continuaba ante una alucinada Ivana que no entendía nada.

Jordi, a Avilés: «Miles de personas que han sufrido bullying en la escuela no han hecho daño a nadie, no han difamado a nadie, no han mentido a nadie» https://t.co/0FBgMJbayp #ConexiónHonduras13 pic.twitter.com/suhoSgdoKh

«Miles de personas que han sufrido acoso en la escuela no han hecho daño a nadie, no difaman a nadie…», decía el presentador que, además, pidió a Avilés que pusiera al día a su ex compañera de todo lo que se había descubierto en España mientras ellos estaban en Honduras. Así, José Antonio miraba de frente a la argentina y entonaba el mea culpa: «Mi paso por el reality ha hecho que salga mucha información mía, que se muestre un José Antonio del que no estoy nada orgulloso. Tú ya me lo dijiste un día en la playa y al final pues ha sido un paso negativo, con mucha información fuera de la que no me siento orgulloso y hay que hacer frente a lo de fuera».

La cara de ella era un poema y no entendía nada por lo que Avilés se abría más: «Va a sonar muy mal. Y me cuesta decirlo aquí. Ha salido a la luz una vida paralela que lo único que demuestra es que he sido un drogadicto de la mentira. Ha salido todo a la luz. Hay una serie de víctimas por mis mentiras», decía.

Decidido a dejar atrás sus problemas, Avilés confesaba que había empezado a hacer terapia: «He dado un paso atrás y he decidido ponerme en manos de profesionales que me ayuden. Tú ya me dijiste en la playa que no necesitaba mentir para demostrar quién era y ahora desde hace unos días estoy en terapia con una psicóloga de aquí. Me he puesto en manos de profesionales y el primer paso es reconocerlo», le explicaba a Ivana.

Jordi González ponía en duda que hubiera comenzado una terapia y aseguraba que solo se trata del apoyo psicológico que reciben todos los concursantes de Supervivientes cuando terminan su concurso. Pero Avilés lo desmentía y confesaba que ya llevaba varias sesiones.

En plató, otro de los damnificados de su ‘red de mentiras’ era Antonio Pavón, con quien se inventó un rollete. Jordi González propuso a Avilés que le pidiese disculpas y el ex superviviente lo hizo. Su compañero no ha querido hacer leña del árbol caído y le ha deseado que se recupere aconsejándole que deje ver «al Avilés divertido».


Fuente: Leer Artículo Completo