La boda de Lady Kitty Spencer con el magnate Michael Lewis ha sido una de las más importantes del año. Uno de los aspectos más llamativos del enlace ha sido el vestido de novia, creado por Dolce & Gabbana (marca de la que ella es embajadora), que ha lucido la sobrina de Lady Di. Una creación espectacular de encaje floral, con cuello alto, mangas largas y hombros abullonados que ha captado todas las miradas y se ha convertido en una sensación en las redes sociales. El escenario fue Villa Aldobrandini, ubicada en Roma y que data del siglo XVII.
Sin embargo, no fue el único look que Lady Kitty Spencer lució el día de su boda. Se cambió un total de cinco veces, todas ellas con creaciones de Dolce & Gabbana. Uno de esos estilismos iba rematado por una diadema floral en el pelo. Pero la joya que brilló por su ausencia fue la tiara Spencer.
Creada en los años 30 por la prestigiosa joyería británica Garrard, la tiara Spencer alcanzó su máximo momento de gloria cuando fue lucida por Lady Di el día de su boda con el príncipe Carlos de Inglaterra, el 29 de julio de 1981. También la llevaron Lady Sarah Spencer y Lady Jane Spencer, hermanas de Diana, en sus respectivos enlaces.
La madre de Lady Kitty Spencer, Victoria, también la lució en su boda con Charles Spencer (su padre, que no asistió a la boda), que terminó en un tormentoso divorcio. Esa precisamente podría ser la razón por la que ella ha decidido no usarla, según se ha comentado entre la aristocracia inglesa. Sin embargo, Lady Kitty Spencer no ha hecho ninguna declaración al respecto. La muerte prematura de Lady Di en un accidente de tráfico en 1997 también ha sido señalada como una de las causas por las que su sobrina decidió no llevar la tiara Spencer el día de su boda.
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