Lleva casi veinte años en la moda –comenzó a los 16 como modelo aunque su fama tardaría algún tiempo más en llegar–, pero Alexa Chung nunca podrá morir de éxito. La británica ha demostrado que hay pocas plazas que se le resistan y que todo lo que hace siempre lo hace bien. En una industria en continuo movimiento, pocas pueden presumir de mantenerse en la cima sin tambalearse, pero ella es la verdadera encarnación del estilo británico para siempre, ese que está por encima de las tendencias y sobrevive al paso del tiempo. De ella aprendimos que el Barbour no es solamente una anorak pijo y de reinas y que se puede ensuciar de barro y llevar con unos pantalones de vinilo, que las bailarinas se llevan con vaqueros, pero también con vestidos de noche, que el pelo siempre queda mejor cuando se seca al aire –su melena long bob es una de las más copiadas en todo el mundo–, que el británico es el mejor acento del mundo y que la voz rota es sexy. Alexa Chung no es como las demás.
© Creatividad de Mar Lorenzo, imágenes de Getty Images
Fue la primera influencer antes de la eclosión de la influencers, dj, empresaria, diseñadora… sus colecciones son de las más celebradas durante la semana de la moda londinense y, a través de ellas, reproduce el armario que todas querríamos tener. Las marcas se la rifan y su nombre es sinónimo de éxito. El paso del tiempo no ha hecho más que confirmar lo que ya sabíamos: Alexa crece, se adapta, madura y camina al ritmo de los tiempos sin perder ni un ápice de su frescura. La que fuera el icono indie en los dos miles es ahora un icono para siempre y su estilo, lejos de quedarse desfasado, ha evolucionado con ella.
© Creatividad de Mar lorenzo, imágenes de Getty Images
Derrocha estilo, insolencia y seguridad en sí misma, es parte de su encanto. Dice que no puede parar de fumar un cigarrillo tras otro, se ríe con su mejor amiga Pixie (Geldof) y bromea en su cuenta de Instagram y en sus vídeos de youtube. Nos enamoramos un poco más de ella en cada una de sus apariciones mediáticas y en cada foto que sube a su feed, la británica con antepasados chinos (por parte de padre) es la amiga que todos querríamos tener.
Durante la celebración de las recién finalizadas fashion weeks, Alexa ha hecho de la calle su verdadera pasarela y ha dejado algunas lecciones de estilo que pasarán a formar parte de los manuales de moda para siempre:
– Un vestido de noche puede transformarse en un look diurno si lo combinas con un abrigo camel (nos estamos refiriendo al vestido negro cut out de JW Anderson que ella combinó impecablemente con un abrigo de este color).
– Los pendientes de perlas se pueden llevar con bailarinas y un vestido de tul y no resultar cursi. Alexa lo demostró durante el desfile de Simone Rocha.
– Los trajes de chaqueta y falda, mejor si son coordinados. Inolvidable su conjunto de Erdem con estampado de flores diminutas.
– La cazadora biker de piel siempre, siempre funciona. Sobre todo si, como Alexa, no puedes renegar de tu pasado un poco rock and roll.
– El pelo siempre secado al aire o, como mucho, con un discreto mechón trenzado. Sobre todo si te vas a poner un vestido de noche en rosa metalizado y una capa negra. Menos siempre es más.
– Las chaquetas- vestido con hombros voluminosos se llevan con camisa blanca debajo y con mary jane de charol con calcetines. ¿Demasiado sobrio? Probablemente, el look más cool de todos los que la británica ha elegido durante estos días. Por cierto, lo firma Miu Miu.
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