Es la tercera vez que el príncipe Carlos viaja a Grecia de manera oficial y, en 2018 lo hizo junto a Camilla de Cornualles y fue la última vez que estuvo en el país. Un destino especial para Carlos de Inglaterra pues su padre, el duque de Edimburgo, nació en Grecia y pasó parte de su infancia antes de irse exiliado. Este viaje se ha producido por petición del gobierno británico y con motivo de las celebraciones del bicentenario de la independencia griega. Dos días de tour real muy esperado tras la ausencia de viajes por la pandemia y en el que Camilla de Cornualles ha desplegado su máximo estilo.
El príncipe Carlos y la duquesa aterrizban en el aeropuerto de Atenas y eran recibidos con alfombra roja y la embajadora en Grecia, Kate Smith. De allí fueron directos a su primera cita: la ceremonia de reapertura de la Galería Nacional de Grecia, que ha estado en obras en los últimos seis años y cuya inauguración ha coincidido con el 200º aniversario de independencia del país.
Tanto para la llegada como para esta visita, Camilla de Cornualles ha elegido un sofisticado conjunto compuesto por un vestido oscuro, con remates blancos en los puños de una de sus diseñadoras de cabecera, Fiona Clare Couture, y una capa blanca de Anna Valentine. Lo ha acompañado de su bolso favorito de Moynat y unos zapatos de salón de tacón ancho. Aunque una de las cosas que más ha llamado la atención ha sido su mascarilla.
Un diseño de tela negro con el estandarte de su marido impreso y el lema “Ich Dien” (Yo Sirvo), que tras la famosa entrevista de Meghan Markle y el príncipe Harry parece toda una declaración de intenciones y una respuesta alta y clara a todas las acusaciones vertidas sobre la corona británica.
Tras visitar el museo en compañía de su director, del ministro de cultura y del Primer Ministro y su mujer, la pareja disfrutó de una cena de estado en la Casa Presidencial de Atenas con la presidenta de la República Katerina Sakellaropoulou y su marido como anfitriones. Para esta recepción, Camilla de Cornualles apostó por un vestido estilo caftán en azul celeste. Un estilo entre exótico y sofisticado que es una de sus especialidades y en un color que le favorece especialmente.
El diseño iba rematado por unos apliques en dorado que combinaban con los zapatos, la cartera de mano y la mascarilla de la duquesa. Camilla remataba el conjunto con las tradicionales perlas de su collar y sus pendientes.
Esta misma mañana, el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles se desplazaban hasta la icónica plaza Syntagma, donde han presenciado la ceremonia del Memorial por el Soldado Desconocido. Un acto solemne para el que Camilla ha elegido un sobrio abrigo de seda en un azul oscuro casi negro, perfectamente entallado y rematado con encaje en la parte inferior. Unos zapatos de salón bicolores y una grandes perlas de pendientes completaban un conjunto elegante y altamente favorecedor.
Camilla de Cornualles borda así la maleta de este viaje de estado con la que parece lanzar algún que otro mensaje sin necesidad de decir nada.
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