Perfilar la cronología exacta de una tendencia es una tarea complicada sino imposible a no ser que su gestora pertenezca a la realeza. En ese caso, establecer una historia detallada con fechas e incluso horas no solamente es posible, sino facilísimo, pues la organización de su vida es de dominio público. El caso que hoy nos ha traído hasta aquí pertenece precisamente a ese grupo, al de las tendencias fundadas por royals. Y menuda royal, pues hablamos nada más y nada menos que de la Reina Isabel II, que ha logrado convertir su abrigo favorito – de color morado – en la última tendencia del invierno y la primera de la primavera. Veamos cómo se han desarrollado los acontecimientos.
Cronología de una tendencia anunciada
· 25 de diciembre de 1994, Sandringham, Inglaterra.
· 11 de marzo de 1996, Westminster, Londres, Inglaterra.
· 3 de febrero de 2013, King's Lynn, Inglaterra.
· 20 de junio de 2013, Ascot, Inglaterra.
· 21 de diciembre de 2017, Londres, Inglaterra.
· 6 de noviembre de 2019, Aylesford, Inglaterra.
· 30 de enero de 2020, Zara y Mango, España.
Cronología de una tendencia real y anunciada.© Fotografías de Getty Images; Creatividad de Mar Lorenzo Sales
El abrigo de nuestra reina favorita que ha conseguido captar la atención de dos de las canteras más fiables y boyantes de la industria – Zara y Mango – es de color morado, de largo hasta la rodilla y presenta siempre – o casi siempre – doble botonadura. Aunque el que más ha llevado Isabel II es púrpura, también vemos algún que otro modelo más empolvado. La traducción que las marcas han hecho de esta pieza es doble. Por una parte está la versión de Zara que la reinventa en formato americana corta y cruzada y, por otra, la de Mango, que respeta el largo aunque le añade solapas y difumina los botones.
© Fotografías de Getty Images; Creatividad de Mar Lorenzo Sales
· Abrigo de Mango, disponible aquí.
· Americana cruzada de Zara, disponible aquí.
Eso sí, hay algo que ninguna de las marcas low cost consigue imitar: su manual de uso. En ese sentido, podemos decir que nadie lleva el abrigo morado con tanta gracia y estilo como la Reina Isabel II, quien le añade siempre unos guantes negros (por eso del frío), un collar de perlas (por eso del vestir clásico) y su eterno bolso Launer (por eso de la fidelidad). El cuarto accesorio con el que la reina actualiza este abrigo tiende a variar: a veces puede ser un gorro, otras un pañuelo estampado y atado. Es probable que nuestra aplicación práctica diste mucho de sus estilismos, pues nosotras estamos más de abrazar tendencias nuevas que de perpetuar las vetustas. Lo que nos apetece más es llevarlo con vaqueros pitillo, pantalones de efecto piel o shorts con medias tupidas. Pero siempre reconoceremos el origen de la tendencia que nació en una habitación del Palacio de Buckingham.
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