QUÉ HA PASADO
• Kenan y la pequeña Tugce fallecen en un incendio.
• Selim se hace cargo de los negocios familiares.
• Serdar quiere llevarse a su hija fuera de la ciudad.
Zeynep amanece angustiada. Al despertarse se da cuenta de que su esposo no está en su cuarto y temiendo que haya hecho una locura, sale en busca de ayuda. Cuando le explica lo ocurrido a su suegra, ambas se marchan al cementerio, donde el joven suele pasar largas horas frente a la tumba de su hermano. No obstante, tampoco se halla ahí. Las mujeres no tienen más remedio que volver a casa y esperar a que regrese.
Tiempo después, el desaparecido entra por la puerta acompañado por su amigo Umit. “Lo encontré en un lugar cercano a la cabaña donde se produjo el incendio que acabó con Kenan y Tügce. Estaba desorientado y con los ojos llorosos”, comenta el chico. Aliye le agradece haber traído de regreso a su hijo: “No hubiera soportado perder de nuevo a otro miembro de mi familia. Creo que mi corazón ya no soporta más dolor”. La anciana no sospecha que el supuesto salvador solo se ha acercado al clan de los Emiroglu para ganarse su confianza, pues se ha aliado con Serdar para destruirlos por completo.
Sevda echa las cartas a Melek en el trabajo
Por otro lado, Veysel y Murat comienzan a arreglarse para asistir a un compromiso: la firma del contrato de alquiler de su nueva tienda. Tülay los observa emocionada: “Me hace mucha ilusión que, por fin, montéis el comercio que tanto queríais”. Cuando los tres se disponen a salir de la casa, alguien les corta el paso: es el abogado que les lleva todo el papeleo relacionado con su negocio. “El señor que iba a arrendarles el inmueble ha fallecido y ahora sus hijos no quieren desprenderse de él. Lo siento, se han quedado sin local”, informa. La noticia les cae como un jarro de agua fría.
Lejos de allí, Melek está a punto de terminar su jornada en el taller de costura. Sin embargo, antes de que abandone su puesto de trabajo, Sevda se ofrece a echarle las cartas y ella acepta. “Veo mucho dinero en tu futuro, te casarás con un hombre rico”, dice la mujer.
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