Ser turista en la ciudad en la que vives es posible. Más allá de los monumentos, de las actividades de ocio y de las ofertas que nos encontramos a pie de calle existe también un amplio abanico de propuestas que encontramos de puertas adentro en los hoteles. Más aún si hablamos de grandes urbes en las que apenas existe barrio que se libre de tener uno. Si en España no tenemos hábito de acudir a estos alojamientos y recurrimos más a bares y cafeterías para pasar el rato, en cambio, en otros países, conocer los hoteles de las ciudades es una rutina que muchos habitantes frecuentan hacer en sus agendas.
No es de extrañar. La mayoría de ellos son grandes construcciones que aúnan arte, arquitectura y ocio en sus estancias. De gran magnitud, con una decoración de interiorismo excepcional y un servicio que viaja más allá de sus estrellas, los hoteles pueden resultar un espacio maravilloso para huir por momentos del ajetreo de la ciudad y para dejarse llevar por la calma desconectando, por completo, de las tareas pendientes.
Turismo hotelero: evadirse en la ciudad
Tomar un café, jugar a los bolos, disfrutar de tratamientos de belleza únicos, leer en su biblioteca, disfrutar de un cóctel en su terraza exterior o, simplemente, dormir una noche en una de sus habitaciones y descansar por completo. ¿Quién dijo que solo se enciende el off en vacaciones? Puedes hacer que tu día a día sea más llevadero gracias a la inmensa oferta hotelera que hay en las grandes ciudades.
En Madrid, además, esta propuesta no deja de crecer. Y hay variedad para todos los gustos: desde los más clásicos hasta los más vanguardistas y modernos. Algunos incluyen una gran apuesta por la gastronomía, otros en cambio abogan por convertir tu descanso entre sus ventajas, también los hay que se erigen como un templo de bienestar con spa y, muchos, lo tienen todo. Por eso a continuación reunimos en un listado algunos de los nombres que ya están destacando por imponerse como visitas obligadas para todos aquellos que quieran evadir la mente y busquen espacios en los que pulsar el botón de apagado. Toma nota.
En plena Castellana se encuentra uno de los spas más completos de Madrid. Se trata de Sense, A Rosewood Spa, un templo de cuidados para el cuerpo y la mente en el que se distinguen servicios que alternan desde rituales, como el de laurel o el mayrit hamman, hasta masajes terapéuticos o relajantes, tratamientos exclusivos para el rostro y el cuerpo que buscan darle a todo su visitando los estándares de relajación y bienestar más lujosos.
Además, el Rosewood Villa Magna más allá de tener unas instalaciones que cautivan a cualquier, cuenta con una oferta gastronómica espectacular. Su restaurante Las Brasas de Castellana es de esos que permanecen siempre en el recuerdo: arroz carnaroli con sobrasada y calamares, croquetas de gambas al ajillo, jarretes de ternera lechal… ¡Una delicia!
¿Dónde? P.º de la Castellana, 22, 28046 Madrid.
https://www.instagram.com/p/CZXRpILNqJv
Una publicación compartida de VP Hoteles (@vp_hoteles)
El Gingko Garden o el jardín que nadie se espera en el barrio de Salamanca. Alejado del tumulto, este oasis natural del VP Jardín de Recoletos acoge un espacio perfecto para disfrutar de una buena comida o cena en terraza sin estar a pie de calle.
Se encuentra en la planta baja del VP hotel de Recoletos y a veces cuenta hasta con actuaciones musicales en directo para que la velada sea, incluso, más mágica.
¿Dónde? Calle Gil de Santivañes, 6, 28001 Madrid.
https://www.instagram.com/p/BtEfRgcBuHn
A post shared by BLESS Hotel Madrid (@blesshotelmadrid)
¿Quién se espera que haya una bolera en la planta baja de un hotel? Solo el BLESS, que fue reformado y ha vuelto a abrir sus puertas hace cuatro años, podría lograr esta oferta en su edificio. Su bar clandestino, el Fetén, como su nombre indica es el perfecto para relajarse una tarde y dejarse llevar por el ocio mientras se degusta una buena bebida.
Es perfecto para el afterwork y, además de coordinarse con la estética del BLESS, se conjuga también con la magnífica oferta que encontramos en el restaurante Salvaje, una experiencia que une diversión y buen comer en un mismo espacio de la mano del chef Fermín Azku.
Aún hay más: su roof top con piscina. Has oído hablar de él seguro. Se trata de Pico Pardos, una terraza de estilo amazónico y con guiños asiáticos que se encuentra en lo alto de la milla de oro madrileña.
¿Dónde? Velázquez, 62, 28001 Madrid
Tiene gimnasio, pero su cafetería piano bar te enamorará. El Silken Puerta Madrid se encuentra en un enclave perfecto para sentirse fuera de la ciudad: cerca de Ifema y del Aeropuerto de Adolfo Suárez.
Si hay un espacio de este gran alojamiento que conquista este es, sin duda, su piano bar. De aires modernista, con obras de arte colgando de sus paredes y gran color, resulta un espacio idóneo para sentir estar en otro lugar. Además, en la época estival este hotel de cuatro estrellas te ofrece una alternativa magnífica: la terraza, un espacio perfecto para trabajar con el ordenador o para tomar algo en buena compañía.
¿Dónde? C. Juan Rizi, 5, 28027 Madrid.
Si el barrio de los Austrias es la zona que nadie espera encontrarse en Madrid, verlo desde las alturas es, incluso, más sorprendente. En la sexta planta del Hotel Urban es posible hacerlo, así como divisar las arterias más reconocidas de la capital: Gran Vía, Alcalá o el impresionante parque del Retiro.
Tanto huéspedes como visitantes pueden subir a la terraza del urban (rodeado de la Colección privada más importante de Papúa Nueva Guinea que se puede disfrutar en el Hotel) y dejarse sorprender por su carta de coctelería, así como por su fabulosa experiencia gastronómica , en la que destaca ‘México D.F’, el nuevo menú degustación de Aurelio Morales en CEBO, reconocido con estrella Michelin.
¿Dónde? Carrera de S. Jerónimo, 34, 28014 Madrid.
“Muy tradicional. Muy nuestro. Muy de Madrid”. El hotel NH Collection Palacio de Tepa ha inaugurado, desde su entrada a pie de calle en Plaza del Ángel, el tercer restaurante Castizo (del grupo Carbón Negro) de la capital. Se trata de un emblemático establecimiento situado a pocos pasos del Barrio de las Letras en el que priman las elaboraciones únicas de recetas madrileñas en las que, siempre, existe un twist diferenciador: guiso casero de cuchara, rabo de toro estofado, gambas rojas de garrucha, coquinas de Huelva o una espectacular tarta de queso. Estos son tan solo algunos de los platos inolvidables que deleitarán los paladares de cualquier comensal del Castizo.
Además…la decoración corre a cargo de Proyecto Singular y mimetiza, a la perfección, la tradición con el estilo vanguardista, incluyendo también frases de personajes históricos en su decoración. Por si fuera poco: su ubicación es fantástica y se levanta sobre este hotel que es un palacio que data del siglo XVIII, perfecto para alojarse si se desea completar la experiencia.
¿Dónde? Plaza del Ángel, 9, 28012 Madrid.
Un hotel que tenga un bar secreto con un mirador privilegiado a Diana Cazadora, que incluya un rincón de selfie hollywoodense, una viga dañada por un bombardeo de la guerra civil española o que permita comer un restaurante con dos ambientes diferenciados. Sí, existe y se llama Hyatt Centric, en Gran Vía.
El restaurante, además, no deja a nadie indiferente. Se trata del conocido Hielo y Carbón, un establecimiento que fusiona dos entornos: Por un lado, ‘Hielo’, gintonería en la que se puede degustar cócteles artesanales profesionales, vinos regionales y una amplia selección de cervezas. Por otro, ‘Carbón’, un patio madrileño decocina de carbón caliente con sabrosas carnes locales.
Una gran apuesta por el producto de calidad que guarda origen en selectos proveedores capaces de hacer satisfacer a cualquier paladar.
¿Dónde? Calle Gran Vía 31, 28013, Madrid.
Fuente: Leer Artículo Completo