Kate Middleton y el príncipe William dieron ayer por finalizada una intensa gira que les ha llevado a recorrer Escocia, compartiendo emocionantes momentos con los trabajadores sanitarios que han estado al pie del cañón durante la pandemia, y recorriendo los lugares más especiales, como la Universidad de St. Andrews, donde se conocieron hace veinte años y dieron comienzo a su relación.
Una gira en la que Kate Middleton ha vuelto a desplegar estilo en cada una de sus elecciones estilísticas. La duquesa lo ha hecho combinando prendas de firmas como su jersey de Erdem o su abrigo de Alexander McQueen con otras low cost como sus blazer de Zara y Massimo Dutti. Y por supuesto no han faltado en sus looks joyas especiales de la corona, como los impresionantes pendientes que le ha prestado Isabel II.
Precisamente para uno de sus últimos actos (y también de los más emotivos), Kate Middleton escogió un vestido rosa de la firma ME+EM con el que confirma que el color rosa se ha convertido en el favorito de las royals para sus eventos más destacados. El escogido por Kate Middleton es un vestido camisero con la parte delantera plisada, de manga larga acabada en puño y lazada en el cuello. Aunque el diseño original es suelto, Kate escogió un cinturón para ajustarlo en la cintura y lo combinó con unos salones del mismo tono.
Un vestido de princesa con el que quiso cumplir el sueño de Mila, la niña de cinco años enferma de leucemia con la que se reunió, y que se ha convertido en símbolo del confinamiento en Reino Unido y una de las protagonistas del proyecto Hold Still con una foto en la que aparece besando la ventana de la cocina de su casa mientras su padre está fuera, al otro lado del cristal.
Un look con el que Kate confirma que el color rosa es, decididamente, uno de los favoritos de las royals para las ocasiones especiales. Si la duquesa de Cambridge lo ha lucido en este encuentro de especial significado, otras mujeres de la realeza, de doña Letizia a Máxima de Holanda, pasando por Victoria de Suecia, Carolina de Mónaco o su hija Carlota lo han llevado para estilismos de invitada o actos de gran relevancia. Repasamos los mejores looks rosas de las royals europeas.
Para su cita con la pequeña Mila, Kate escogido un vestido rosa de largo midi con la parte delantera plisada de la firma ME+EM.
La Reina escogió un vestido rosa de largo midi, manga larga y cuello redondo con bordados de Felipe Varela, que combinó con complementos en el mismo tono y un sombrero con rejilla también en rosa.
Doña Letizia volvió a confiar en Felipe Varela para la boda de Victoria de Suecia. En esta ocasión escogió un vestido largo de manga corta en tono rosa empolvado con flores en relieve y un recogido con trenzas coronado por una tiara.
Para el enlace del príncipe Guillermo y la princesa Estefanía de Luxemburgo, doña Letizia volvió a confiar en el color rosa empolvado, en esta ocasión luciendo un abrigo de encaje con salones y sombrero de rafia a juego.
Con este espectacular vestido rosa de gasa con volantes acudió la princesa de Mónaco a la cita de 2018 del Baile de la Rosa, acompañada por su amigo Karl Lagerfeld.
En 2013 Carlota escogió este espectacular vestido rosa de plumas con falda mini por delante y cola. Un look que la coronó como la más espectacular de la gala.
Para la ceremonia religiosa del enlace de Charlene y Alberto de Mónaco la hija de Carolina lució este vestido rosa pastel de Chanel con escote barco y lazo negro en la falda. Un look de invitada perfecto.
La heredera de Suecia lució en 2019 un espectacular diseño de tul en rosa ajustado en la cintura y con una voluminosa falda, un diseño firmado por Selam Fessahaye que fue uno de los más comentados de Victoria ese año.
El rosa fue el color favorito de las royals en la boda de los reyes de España. Mette-Marit de Noruega escogió un vestido plisado en rosa pastel combinado con una americana corta.
Máxima de Holanda también escogió el rosa para la boda real española. Con un vestido de paillets en rosa empolvado, abrigo a juego y pamela XXL, fue una de las más elegantes del enlace.
Para esta boda familiar, Máxima desplegó uno de sus looks más espectaculares, un vestido evasé de escote corazón en rosa empolvado con flores bordadas y una gran capa malva.
Este vestido de tul firmado por Gucci en distintos tonos de rosa sigue siendo uno de los looks más elegantes del armario de la duquesa de Cambridge.
Para la celebración del cumpleaños de la reina Isabel II en 2017, Kate llevó uno de los looks más alegres de la jornada con este vestido rosa chicle con tocado a juego.
Un año después, Meghan Markle fue la protagonista de la celebración con este vestido rosa empolvado de escote Bardot firmado por Carolina Herrera.
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