Está destrozado. Hecho polvo. Lo llevamos viendo casi una semana. Para Diego Matamoros, la entrada de su mujer, Estela Grande, en la casa de ‘GH VIP 7’ está siendo un calvario y todo apunta que va a suponer el punto y final a su matrimonio. Él no sabe ni de estrategias ni de juegos en los que quiera entrar. Nada más hay que verle.
Pero, por si la prueba gráfica evidente no le valiese a alguno, ha sido su padre el que ayer salía a dar la cara por él en el plató de ‘Sálvame’. Kiko Matamoros ya le había mandado un mensaje, vía Rafa Mora, en el mismo programa el pasado viernes. Unas palabras para que abriera los ojos y se diera cuenta de que la culpa de ese tonteo no era solo de Kiko Jiménez, que su mujer estaba encantada de la vida también.
Ayer, Kiko aseguraba que Diego está «enamorado» y que este sufrimiento por el que está pasando le ha hecho perder nada menos que 9 kilos. Y llevamos un mes escaso de programa… Una bajada de peso provocada, exclusivamente, por esa angustia que está viviendo al ver cómo su mujer se acerca sin escrúpulos al que entró en el ‘reality’ como novio de Sofía Suescun.
Matamoros padre sostenía que su nuera está demostrando «ser mala» o «ser tonta», y que sea uno y otro supuesto, debería de ser más que suficiente para que su hijo tomase una determinación con la contundencia que requiere el momento. Porque la cosa parece haber entrado en una espiral de la que ni ella ni Kiko pueden -o quieren- salir.
Diego ya dejó claró este fin de semana en ‘Sábado Deluxe’, que no va a esperarla cuando salga del programa -ya el domingo se ausentó del debate- y que tendrá las maletas en la puerta cuando llegue a casa. También ayer tuvo que salir a desmentir que fuese ese concursante sorpresa que va a entrar en Guadalix de la Sierra para llenar el hueco que ha dejado el abandono, por problemas de salud, de Nuria MH, aclarando que está padeciendo fuertes cuadros de ansiedad.
De hecho, ayer era captado por las cámaras de ‘Sálvame’ y, hundido, acababa abrazóandose al reportero del programa Kike Calleja, asegurándole que está físicamente destrozado. «Estoy superado por la situación y por todo lo que llevo acumulado en mi vida, mi corazón dice que quiera verla, sentirla, abrazarla, darle un beso y mi cabeza dice que te dé una respuesta a todo esto, para, habla las cosas. Estoy bloqueado», le explicaba.
Fuente: Leer Artículo Completo