Quince meses después de su muerte, la herencia de Karl Lagerfeld no solo no se ha repartido sino que cada vez presenta más interrogantes. El modisto alemán falleció en febrero de 2019 en la ciudad de París a los 85 años. El que fue director creativo de las firmas Chanel y Fendi dejó un gran hueco en el mundo de la moda y un importante legado económico que hace que su nombre siga estando de actualidad.
Según publicó hace unos días Le Parisien, se estima que el patrimonio de Lagerfeld está en torno a los 200 millones de euros aunque otras estimaciones hablan de que podría llegar a los 400 millones de euros. Aunque se había especulado con que el diseñador alemán no había dejado testamento, el diario parisino ha publicado que existe un testamento que solo conocería su abogado de toda la vida, Lucien Frydlender, de 87 años, confinado en París y con problemas de salud.
Un testamento en el que se recogería que Karl Lagerfeld quería que su fortuna estuviera en manos de siete personas y de su gata. Los beneficiarios serían su gata Choupette, la gobernanta Françoise Caçote, y una serie de amigos y modelos además de su ahijado, Hudson Kroenig. Pero según apunta el diario británico The Daily Mail, la guerra por ver quién era el favorito de Karl y a quien deja la mayor parte de su herencia está abierta.
Karl Lagefeld nunca tuvo hijos y su gran amor fue Jacques de Bascher, quien falleció de Sida a las 38 años, en 1989. Según apunta el Daily Mail, el káiser de la moda tenía, además de su casa de París, una casa en Vermont, otra en Biarritz y un apartamento en Mónaco valorado en 25 millones de libras (cerca de 28 millones de euros).
A sus propiedades inmobiliarias hay que añadir una extensa biblioteca, sus colecciones de ropa (con más de 1.000 camisas blancas entre otras prendas), piezas de decoración y un Rolls-Royce Phantom. Precisamente la dificultad para calcular la cuantía de su herencia está en el origen de la demora de su reparto.
Según afirma el Daily Mail, en 2016 se filtró que Lagerfeld no había declarado 19 millones de libras (21 millones de euros) en ingresos y sus negocios han sido investigados. El diseñador tenía una sociedad que le servía para canalizar sus ingresos con distintas firmas de lujo y que tributaba fuera de Francia, asegura el diario británico.
El testamento está registrado en Mónaco y sus beneficiarios son sus amigos íntimos Sebastian Jondeau y Baptiste Giabiconi, su famosa gata Choupette, la que fuera su gobernanta, Françoise Caçote, el exmodelo Brad Kroenig y su hijo, su directora de comunicación, Caroline Lebar, y el modelo Jake Davis. El estado de salud de quien siempre llevó sus finanzas, Lucien Frydlender, complica el reparto de la herencia, pues él es el mejor conocedor de la fortuna de Karl Lagerfeld, y quien se tendría que haber encargado de enumerarla.
Demasiados cabos sueltos para el reparto de una herencia que está dando mucho que hablar y que parece haber enfrentado a los herederos que Karl siempre consideró su familia.
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