‘La hora chanante’ nos lo presentó allá en el hoy lejano 2002. Y su papel como Teodoro en ‘La que se avencina’ le acercó a millones de espectadores. Ernesto Sevilla nos ha hecho reír delante de las cámaras en la última década y media y, ahora, se ha propuesto un nuevo reto: ponerse detrás y sorprendernos.
Era en el suplemento de ‘El País’ del pasado fin de semana el que, en un reportaje realizado sobre moda masculina que ya tenían producido antes de que estallase la crisis por el coronavirus, desvelaba las intenciones del manchego, que trabaja mano a mano con Joaquín Reyes y Miguel Esteban.
Él mismo lo explicaba en ese artículo en el que explicaba que los tres se reunían con una pizarra en una sala y hacían unas sesiones de ‘brainstorming’ que ahora han tenido que trasladar a la era digital y mantener mediante videoconferencia. Exigencias del guion. O de la confinación que todos debemos seguir para que esta situación termine cuanto antes.
El propio Ernesto ha mostrado cómo se ha servido de las nuevas tecnologías, como la inmensa mayoría de la población, para hacernos más llevaderos estos días encerrados en casa. Ayer mismo montaba una fiesta virtual que nos mostraba con unos pantallazos de esas llamadas en vídeo en su cuenta de Instagram.
Además de ocupar su tiempo en estas actividades de ocio y de comunión con los suyos, aunque sea cada uno en su casa, ahora tendrá tiempo de sobra para ponerse a escribir el guion de esa obra que supondrá una línea más en un currículum hecho por y para entretener al gran público. Lo que trata de hacer ahora, en tiempos complicados, a través de las redes sociales.
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