Es más que posible que toda esta vorágine de teletrabajo te haya pillado sin un despacho en condiciones en casa. La ausencia de un espacio para ti, con un escritorio y una silla adecuadas, hacen que trabajes en cualquier rinción, y que el ordenador termine, con frecuencia, encima de tus piernas. ¿Las consecuencias? Dolor de espalda, claro. Pero no temas, porque esta dolencia puede aliviarse, y mucho, con una rutina de ejercicios de 10 minutos que, además de remediar este problema, te ayudará a dormir mejor. Todo son ventajas.
La idea ha llegado desde la cuenta de Instagram de @oysho_sport, de la mano de Apolline de @yog_apo, que en este vídeo nos enseña paso a paso a seguir esta sencilla rutina a base de posturas de yoga, ideada para devolver la alegría a nuestra maltrecha espalda:
1. Estiramiento sentadas sobre los talones. Ideal para iniciar el trabajo, pues sólo tenemos que sentarnos sobre las piernas y estirar la espalda para empezar a calentar la zona.
2. Posición gato-vaca. Estirar la espalda en sus dos sentidos es la clave. Primero, redondeándola, y después, extendiéndola. Ya verás como sientes un alivio inmediato.
3. Bharmanasana. En este caso, se trata de convertirnos en una especie de "tabla", alternando el estiramiento de un brazo y la pierna contraria, con los dedos apuntando hacia el suelo, y manteniendo la posición durante unos segundos.
4. Vyaghrasana o postura del tigre. El recorrido en este ejercicio será similar al del anterior, pero mayor. Redondearemos la espalda para tocar con el codo en la rodilla contraria, y después estiraremos, procurando (dentro del nivel de cada una), que el brazo y la pierna superen ligeramente la altura de la espalda.
5. Plancha y Balasana o postura del niño. En lugar de realizar la plancha de la manera habitual, dejaremos que el cuerpo trace una línea diagonal, en vez de recta, pero siempre sin arquear la espalda. La idea es llegar a mantenernos en la posición sin modificarla, y después, pasar a Balasana, sentándonos sobre los talones y dejando que la espalda se estire totalmente, quedando el torso pegado al suelo.
6. Parsva Balasana o postura del cachorro. Apoyadas sobre las rodillas y las puntas de los dedos de los pies, llevaremos uno de los brazos por debajo del torso, girando ligeramente la espalda para realizar su estiramiento.
7. Extensión de espalda. Nos tumbamos boca abajo, entrelazamos las manos detrás de la espalda y elevamos el tronco siguiendo el movimiento con el cuello. Es importante hacer cada gesto de forma muy suave para no hacernos daño.
8. La esfinge. Partimos de la misma posición y, nuevamnte elevamos el tronco, pero esta vez, dejando los antebrazos en el suelo.
9. Extensión tumbada. Seguimos en la misma postura, y elevamos, siempre estiradas, una pierna y el brazo contrario. A continuación hacemos lo mismo, pero con ambos brazos y piernas a la vez.
10. La cobra. En este caso elevaremos el torso como en la esfinge, pero despegando los brazos del suelo completamente y dejando sólo las manos como apoyo.
11. El puente. Este viejo conocido implica tumbarnos mirando hacia el techo, con los pies apoyados y las rodillas flexionadas. Elevaremos la pelvis, sin poner el peso en el cuello y mantendremos la posición.
12. Pavanamuktasana o postura de liberación. Llevamos las rodillas al pecho y sujetamos las piernas con las manos, balanceando de un lado a otro para que el estiramiento sea más completo. Y finalmente, volvemos a la posición inicial de Shavasana para terminar.
¿Qué dices, lo probamos?
SUSCRÍBETE AQUÍ a nuestra newsletter para recibir todas las novedades de Glamour.
Nuestros periodistas recomiendan de manera independiente productos y servicios que puedes comprar o adquirir en Internet. Cada vez que compras a través de algunos enlaces añadidos en nuestros textos, Condenet Iberica S.L. puede recibir una comisión. Lee aquí nuestra política de afiliación.
Fuente: Leer Artículo Completo