¿Te acabas de teñir el pelo? Conocemos esa sensación. Está brillante, el color resulta radiante y has conseguido un efecto buena cara impagable. Pero tras la euforia, vienen los champús, las condiciones climáticas y el uso de diferentes productos que van desgastando esa preciosa tonalidad que lucías al salir de la peluquería. De hecho, tal y como nos han explicado desde Living Proof, es precisamente en los primeros lavados tras teñirte cuando más color se pierde. Además, la exposición a los rayos UV y a los minerales presentes en las aguas duras, son también los principales causantes de la degradación del color. Pero no te preocupes, porque la firma tiene una solución.
© Carola de Armas
La recomendación de Living Proof es su champú Color Care Shampoo, que limpia con delicadeza y sin dañar nuestro pelo al estar libre de sulfatos y siliconas. Estos dos enemigos a los que más de una hemos declarado la guerra, hacen que los tratamientos (y también los tintes), penetren peor en el cabello, además de crear una falsa sensación de brillo que, si bien a priori es real, con el paso del tiempo se revierte y estropea el pelo, ya que no le permite respirar correctamente.
Su fórmula, en cambio, nutre y cuida nuestra melena ante la exposición a los rayos UV y esas aguas duras de las que hablábamos, logrando que el color permanezca inalterable durante más tiempo. y de paso, reduce la rotura del cabello por desenredado en húmedo.
Color Care Shampoo de Living Proof.© Cortesía de Living Proof
Si te acabas de lanzar con el tono iced, con el smoky gold o con cualquiera de los colores de moda, no lo dudes, cuídalos como merecen.
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