Como casi todas las ciencias inexactas, la moda no aplica a todos los cuerpos por igual. Esto es, lo que favorece o les resulta cómodo a unas, no produce el mismo efecto en otras. De ahí que la tendencia imperante apueste por evitar ciertos enunciados que hasta ahora se percibían como dogmas: ni las rayas engordan, ni los leggings son para el gimnasio, ni las botas blancas son (solo) de chonis.
En cambio, en el extremo opuesto a todas estas reglas y prohibiciones, existen premisas postivas, generales y universales. Como que los pantalones palazzo fluidos y con pinzas como los que solía llevar Katharine Hepburn alargan las piernas, afinan la cintura y consiguen que hasta la camiseta más básica e informal resulte tan elegante como una camisa. O que las costuras drapeadas en faldas y vestidos, tienen el poder de disimularlo todo y hasta de reducir una talla. Si a este efecto visual le sumamos la influencia del color negro, una abertura lateral y las botas altas de moda, obtenemos la falda de Zara que más que un nuevo fichaje de su catálogo es un MILAGRO.
© Cortesía de Zara
Aunque realidad, todo lo que tiene de mágico no es sino la conjunción de varios elementos. Una vez más: no es magia, es moda y esta vez te vamos a revelar el truco:
→ El drapeado más favorecedor
No solo reduce visualmente el volumen del contorno sino que este efecto óptico aumenta al estar situada ésta en un lateral.
→ La abertura lateral de la pierna
Es una ampliación de la línea que dibuja el drapeado y, por lo tanto, una prolongación de su efecto. Además contribuye aún más a la asimetría al dejar al aire unos centímetros de piel que potencian las diagonales y con ello, la sinuosidad de la silueta.
→ El corte tendencia
En Zara la llaman tubo, en Stradivarius lápiz y en cualquier lugar del mundo: ¡milagro!
© Cortesía de Zara
→ Los colores más versátiles
En negro para disimular y estilizar, en verde para destacar y actualizar tus estilismos de oficina y de fiesta con Gwneth Paltrow y sus Grandes Esperanzas como inspiración.
→ Infinitas posibilidades
La más inmediata: sin medias y con las botas altas de moda. Ni en nuestros mejores sueños hubiéramos imaginado una mejor forma de combinar de dos de las tendencias clave del momento en un conjunto tan elegante para tus estilismos de diario.
Definitivamente, esta falda lo tiene TODO.
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