Tan solo con un par de minutos en Tiktok podemos encontrar decenas de perfiles que se focalizan en dar consejos sobre cómo seguir el método curly para llegar a una melena definida de rizos que parecen estar esculpidos con cincel. El problema de este método es que requiere mucha dedicación y tiempo. Y en este acelerado ritmo de vida que llevamos, no siempre disponemos de él.
Antes de buscar una solución alternativa debemos analizar cuál es el principal problema de las melenas rizadas. La falta de definición y el encrespamiento se deriva de la escasa hidratación que suele caracterizar a estos cabellos. Cuando les rodea un ambiente húmedo la fibra capilar trata de absorber el agua que lo rodea y por eso los cabellos se disparan generando ese frizz -aquí un truco extra para ganarle la batalla-. Por tanto, ¿cómo solucionamos el problema? Con mucha hidratación.
Y justo esto es lo que proporciona al cabello una nueva línea de productos que está revolucionando a las chicas con el pelo rizado más rebelde. «Es como si tuviera el cabello de uno de esos anuncios que salen en la tele», dice una de las usuarias que ya lo ha probado», mientras que otra afirma: «Con este champú me puedo lavar el cabello hasta dos veces por semana, sin que afecte a la calidad de mi pelo».
Esta línea de productos ha sido lanzada por Jonathan Van Ness, la estrella del programa de televisión estadounidense Queer Eye, con sus iniciales JVN. Dentro de su proyecto, hay tres productos que están alcanzando especial relevancia, debido a que usados en su conjunto, forman una rutina de tres pasos que es perfecta para cuidar el pelo rizado y, sobre todo, no requiere tanto tiempo como el método curly, por lo que es perfecta para sustituir a este en los días más acelerados.
Primer paso: aplica el champú
Sin más artificios, el champú Nature cumple la función que debe realizar este producto: limpiar el pelo. Lo mejor de este lanzamiento es que deja el cabello con sensación de una higiene máxima, sin secar la fibra capilar. Esto hace que cumpla esa condición de ‘hidratación máxima’ que necesitan las melenas rizadas. Al ser un champú respetuoso con la estructura del cabello permite que se pueda utilizar cada dos días, sin que el pelo se encrespe y pida su dosis de agua a gritos. Además, según su ficha de producto, su uso te proporcionará una agradable experiencia sensorial: «Está perfumado con limón, grosella negra, sándalo, vainilla y orquídea blanca para dejar el cabello con un olor maravilloso».
Segundo paso: acondicionador
Esta es la clave por la que tantas personas con pelo rizado afirman que es posible reducir la rutina capilar a tres pasos. Hasta ahora, unos rizos bien definidos requerían un cuatro paso tras salir de la ducha: la crema de peinado. Pero este acondicionador al uso -se aplica tras el champú y se aclara- aporta esa definición y permite prescindir de ese cuarto producto, o por lo menos espaciar más sus usos. Este producto es ideal para quien está buscando una rutina minimalista que no le esclavice.
Tercer paso: gotas de brillo nutritivas
Es la guinda del pastel y si el término aceite te produce rechazo de entrada, por miedo a que tu melena acabe bañada en grasa, este no es el caso. Este óleo se pone sobre el cabello húmedo: deposita tres gotas sobre la palma de las manos, frótalas y después pasa estas por toda tu melena sin un orden específico, pero con cuidado de no tocar las raíces. El resultado será un cabello brillante, con destellos naturales que deslumbrarán durante 14 horas, según afirma su ficha de producto.
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