Anna Ferrer, la hija de Paz Padilla, se ha convertido en una de las ‘influencers’ más adoradas y seguidas del momento. La joven ha aprovechado este puente para pasarlo en grande junto a su familia y sus amigos, y como no, disfrutando de una de las cosas que más le gusta hacer junto a su madre, disfrazarse.
Sin embargo, también ha aprovechado la ocasión para desvelar algo que mantenía muy oculto.
«Como ayer os conté cómo había ido mi Puente y todo lo bueno y las buenas sensaciones con las que me había ido a dormir, me siento un poco en la obligación de contaros esto, que realmente es un poco chorrada», comenzaba diciendo la joven.
Y es que al parecer, Anna sufre fuerte dolores de estómago desde hace al menos dos años, y esto le ha obligado a tomar drásticas decisiones sobre su salud y su vida, ya que estos dolores la han provocado hasta problemas a la hora de conciliar el sueño.
«Desde hace dos años tengo como problemas de tripa, de estómago y siempre me duele. O tengo náuseas. No es siempre, cada vez menos y mejor desde que voy al psicólogo, pero sí», decía Anna, quien también desveló que sufría ataques de ansiedad y que quería normalizar la situación.
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