El mundo de la moda lleva ya varias temporadas pendiente de lo que sucede en los países nórdicos. En materia de diseñadores y street style, Copenhague se ha abierto paso entre las capitales de la moda y su semana de la moda se ha posicionado ya como una de las más influyentes a nivel internacional. Las atrevidas combinaciones de colores de sus asistentes, los rompedores diseños de las pasarelas y, sobre todo, el rumbo sostenible que lleva la moda danesa se han convertido en ejemplos a seguir. Es por ello que el interés por las firmas danesas y nórdicas se ha incrementado notablemente.
Rotate Birger Christensen, Ganni, Stine Goya o Cecilie Bahnsen son algunos ejemplos de ello. Estas firmas ya han alcanzado la firma global pero, también hay otras, más pequeñas y menos conocidas, que merece la pena tener en cuenta. Este el caso de Helmstedt, una firma que debutó en agosto de 2018 sobre la pasarela de Copenhague.
La firma toma el nombre del apellido de su fundadora, Emilie Helmstedt, y destaca sobre todo por sus atrevidos colores y estampados, que están totalmente pintados a mano. Según explica, pretende crear un espacio donde el arte se mezcle con moda y sostenibilidad, es por esto último que trabajan exclusivamente con tejidos sostenibles para reducir la huella de carbono de sus prendas.
En su anterior colección, las frutas y un marcado estilo picnic tomaron todo el protagonismo. Uvas y fresas se instalaron en los estampados junto a cuadros vichy de sus prendas y rápidamente conquistaron a prescriptoras de estilo nórdicas y también a algunas españolas como María Bernad o Blanca Miró.
Los precios de la firma oscilan entre los 100 euros de los pañuelos de seda y camisetas y los 750 euros de las prendas más caras (vestidos y chaquetas).
¡Lo quiero!
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